CRISIS DEL CAPITALISMO GLOBAL SU IMPACTO EN EL EMPLEO Y LOS FONDOS DE PENSIONES

La crisis económica mundial empieza a manifestarse de manera agresiva en los principales países desarrollados, que involucra a los países dependientes como el nuestro, como consecuencia de las relaciones económicas, financieras y comerciales que sustenta la economía mundial en tiempos de la globalización. Esta crisis ha obligado al gobierno de los EEUU, a inyectar cerca de 700 mil millones de dólares al sistema financiero para salvarlo de la bancarrota, producto de la mala colocación de créditos hipotecarios que generó un gran forado en su sistema bancario. Esta crisis del capitalismo mundial, se venia venir como consecuencia de la aplicación de una economía sustentado en la expansión belicista, orientado al control de la principal fuente de energía mundial como es el petróleo, que se encuentra bajo territorio de los países del medio oriente.

Los países de Europa, Asia y América Latina no son ajenos a esta estrepitosa caída del capitalismo, por cuanto la economía está íntimamente interrelacionada a través de la colocación de capitales y el comercio mundial. La Interdependencia financiera y comercial hace que la crisis se extienda y comprometa a todos los países. La región asiática donde se observa el mayor crecimiento económico, viene presentando síntomas de retracción de su economía, que ha obligado al gobierno Chino, la economía más dinámica del mundo, a inyectar cerca de 500,000 millones de dólares para sostener su economía y evitar la recesión.

Esta crisis tendrá efectos negativos en el nivel de empleo, que ya empezó a manifestarse en algunos países como España, que venía siendo la economía europea con mayor nivel de crecimiento, donde la empresa Nissan ha ordenado el cierre de su planta con los resultados de desempleo; así mismo, este mismo panorama se empieza a percibir en otros países del Europa, donde el mismo Presidente de Francia Sarkozy ha dicho que esta crisis mundial puede generar movimientos de “revolución”, que se puede entender como la necesidad de crear un orden mas justo y humano, que no acreciente las desigualdades sociales. La OIT estima que esta crisis mundial puede conducir a la pérdida de aproximadamente 20 millones de puestos de trabajo, siendo los sectores más afectados los dedicados a la producción manufacturera con mayor demanda de materias primas, que son precisamente los países desarrollados. En EEUU se viene produciendo la pérdida mensual de casi 70,000 puestos de trabajo a partir del mes de abril último, que son las cifras más dramáticas de desempleo, que asemejan una situación parecida al año 30 del siglo pasado.

Los fondos de pensiones empiezan a mostrar sus primeros síntomas de crisis, por cuanto las AFP tienen en el mercado bursátil su mejor fuente de inversión, las mismas que semana tras semana muestran días negros y caída de las principales cotizaciones de las acciones y valores en juego. En Holanda la gigante aseguradora AIG que patrocina en nuestro país a la AFP IINTEGRA, ha tenido que ser intervenida por el gobierno para evitar que el sistema de aseguradoras colapse. En nuestro país los fondos de pensiones que administran todas las AFP, registran a la fecha una perdida acumulada de cerca de 7,000 mil millones de dólares, que los obliga a crear nuevos nichos de inversión para mitigar las perdidas presentes y futuras; destacando que el fondo de inversiones de las AFP se sustenta en la especulación financiera, como es la cotización de acciones en la Bolsa de Valores, que no representa ninguna garantía para asegurar rentabilidad al fondo de los pensionistas.

Resulta risible que el Presidente García sostenga que nuestra economía se encuentra en buen recaudo de la crisis global del capitalismo, cuando sabemos que nuestro país tiene una estructura productiva que descansa en la explotación de materias primas y con poco valor agregado que depende fuertemente del mercado internacional, que sufre los efectos de la recesion y desaceleración mundial de la economía, que obligará a las empresas a efectuar ajustes en su estructura de personal reduciendo puestos de trabajo, al mismo tiempo, se observará restricciones de nuevas inversiones por la contracción de la demanda

Nuestra economía por su estructura productiva y la relación comercial que conlleva la globalización, donde el modelo económico vigente privilegia al mercado, el cual se debate en franco proceso de deterioro, se vera fuertemente afectado, que no debe ser tomado a la ligera y señalar que estamos blindados. Señalar que el Perú será visto como país refugio de capitales, no guarda ningún sustento técnico y racional. Así mismo, recordemos que nuestro país depende de la remesa anual de cerca de 3,000 mil millones de dólares que envían los peruanos que trabajan en el exterior, quienes también se verán afectados en el nivel de empleo en los países donde residen, que tendrá repercusión en los ingresos de las familias y desestabilizará el sistema financiero local, que ha colocado líneas de crédito hipotecario a través del programa Mi Vivienda; así mismo, se observará problemas en la cadena de pagos por las tarjetas de crédito, que sustenta la dinámica del consumo actual de la mayoría de peruanos.

Lima, 14/11/2008
José Saldaña Tovar
Congresista de la República